Diabólica - S. J. Kinkaid

Título: Diabólica
Autor: S. J. Kinkaid
Género: Ficción
ISBN: 978-8420484563
Páginas:432
Fecha de publicación: 10 noviembre
Editorial: Alfaguara
Precio: 18,95€

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Némesis es una diabólica: un arma letal con aspecto humano. Ha sido creada para proteger a Sidonia, la hija de un senador galáctico. Aunque se han criado juntas, Némesis sabe que no pueden ser amigas ni iguales: su único propósito es defender a su dueña a vida o muerte. Cuando el emperador se entera de que el pgadre de Sidonia está tramando una rebelión, la llama a la corte para tenerla de rehén. Solo hay una manera de protegerla: Némesis debe ir en su lugar y hacerse pasar por ella. Rodeada de peligros, intrigas y traiciones, Némesis deberá ocultar quién es en realidad# justo cuando empieza a descubrirlo.

Diabólica me llamó mucho la atención por las buenas críticas que tenia y por la novedad que presentaba en cuanto al género de ciencia ficción, tras leer la sinopsis y sobre todo saber que era libro único no me pensé para nada en empezarlo porque sinceramente, últimamente no salimos de sagas o trilogías y me apetecía leer algo que empiece y tenga su final en un solo libro. A pesar de que al principio se me hizo un poco introductorio y lento en algunas partes os aseguro que merece la pena seguir leyendo porque llega un punto que no querrás soltarlo. La trama se vuelve más adictiva y los personajes muestran su verdaderas intenciones haciendo la lectura mucho más interesante.

Todas las grandes familias del imperio tienen un diabólico en sus casas. No son humanos a pesar de que en apariencia lo parezcan, tienen ADN de una persona pero son otra cosa: criaturas implacables que una vez vinculadas a una persona se vuelven leales para siempre a su amo. Los defienden de quien quiera hacerles daño, y su manera de hacerlo es matando a cualquiera que amenace su vida. 

«Escogerás su vida antes que la tuya. Yo, sin embargo, no escojo su vida antes que la tuya.»

Némesis es una joven un poco peculiar ya que no es un humana, es una diabólica diseñada y creada para matar. Llegó a su nuevo hogar para defender de cuaquier peligro a la hija de una de las familias más importantes del imperio, Sidonia, a la que debía cuidar y proteger. Pero para ello debían crear un vinculo entre las dos, ya que los diabólicos son seres que no tienen sentimientos, ni amor, ni empatía y mientras no se vinculaban eran imprevisibles y brutales. Hay que educarlos y enseñarles a hablar y a razonar ya que toda su vida se había basado en muerte. Pero ahora tenía la oportunidad de cuidar de alguien y protegerla. Y así es como Némesis y Sidonia se hicieron inseparables, incluso amigas.

«Ya me he acostumbrado a la idea de que los seres humanos mueren o te traicionan, y a pensar que solo podía confiar en mí mismo, pero eso ya no es así. Puedo confiar en ti. Reconocer algo como esto puede sonar como una pequeñez -se le ensombreció la mirada, la voz ronca-, pero, para mí, es el mayor cumplido que puedo hacer.»

«Éramos ambos escorpiones, a nuestra manera, criaturas peligrosas que cruzaban juntas el más traicionero de los ríos. Y juntos podríamos picar.. pero no nos hundiríamos.»

Llegó la noticia de que algunos diabólicos se estaban convirtiendo en amenazas, y temían que pudieran volverse en su contra por lo que el Emperador Domitrian prohibió la posesión de estos series y ordenó matarlos a todos y quien no cumpliera la orden sería acusado de traición. Pero la familia Impyrean y Sidonia no estaban dispuestos a quedarse sin la protección de Némesis y la mantenían oculta. Un día los hijos de las familias más importantes fueron convocados por el Emperador al Crissantemo, y la madre de Sidonia no estaba dispuesta a enviar a su hija por lo que decidieron hacer pasar a Némesis por ella, y enviarla en su lugar. Así es como una diabólica se adentró en el corazón del Imperio para engañarlos a todos y fingir ser alguien que no era: una persona. Si la descubrían no solo la matarían a ella, si no, a toda la familia Impyrean y lo más importante para Némesis era proteger a Sidonia a toda costa. Una vez en el imperio deberá fingir, pensar, sentir y hacer las cosas como si fuera Sidonia. Empezará a experimentar sentimientos que creía que no era posible, ya que una diabólica no puede querer, ni desear, ni sentir pena por otra persona a la que no está vinculada ¿O tal vez si? 

En definitiva, Diabólica, es una lectura que me ha sorprendido muy gratamente. A pesar, de cómo dije antes, el inicio es un poco lento e introductorio, llega un punto en que todo se vuelve intrigante y muy interesante. Una trama llena de traiciones, amor, engaños, conspiraciones políticas y todo por hacerse con el poder a toda costa sin importar a quien se lleven por delante.

Patry