El fuego que nos une - Brittainy C. Cherry

Título: El fuego que nos une

Autora: Brittainy C. Cherry

Género: Romántica, New Adult

Editorial: Principal de los libros

Páginas: 336

Precio: 18.50€ (papel) || 9.49€ (Ebook)

ISBN: 9788416223558

Web de la editorial

«Había una vez un chico, y yo le quise. Y creo que él también llegó a quererme.» Alyssa y Logan lo son todo el uno para el otro, pero un trágico suceso los separa durante años. Cuando finalmente estas dos almas rotas se reencuentran, deberán enfrentarse al pasado. ¿Podrá el amor resurgir de sus cenizas y volver a arder?

Segunda parte de la saga LOS ELEMENTOS (Libros independientes)

Hay reseñas difíciles de hacer, y hoy me toca hacer una de estas que no sabes muy bien como trasmitir lo que siento aun unos cuantos días después de haber leído esta maravillosa historia que llamó mi atención desde el momento que salió a la venta pero que no me había animado con ella hasta hace poco.

 ¿Como ha podido darte la espalda? A ti, Subidón. Eres la persona más bonita, autentica y amable que he conocido jamás.

Es un libro que sabes desde el principio que contiene una de esas historias tristes que al final se te quedan en el corazón de lo bonitas que son en el fondo pero que sufres para acabar de leerlas porque empatizas tanto con los personajes que hasta se te salta una que otra lagrimilla mientras lees lo que les pasa.

La novela está dividida en dos partes. En la primera nuestros protagonistas, Alyssa y Logan, son dos adolescentes que se enamoran por primera vez, nos muestra la difícil vida que les ha tocado vivir por
culpa de sus padres, los de él son un completo desastre y la madre de ella está loca. Puede parecer que a Logan le ha tocado la peor parte, porque vive como puede con los pocos ingresos que tiene, rodeado de drogas y violencia, pero Alyssa tiene que aguantar a una madre egoísta y cerrada de mente tan bocazas que si se quedara callada un mes les haría un favor muy grande a sus dos hijas. Por una desgracia que le pasa a ambos les toca dejar a parte sus sentimientos mutuos y separar sus caminos y ahí es cuando empieza la segunda parte, unos años más tarde, donde se reencuentran después de intentar olvidarse sin éxito el uno del otro, yo creía que en esta segunda parte la vida de ambos sería más fácil… ¡error! Me tuvo sufriendo hasta el final.

«Tu hogar siempre es tu hogar. Incluso cuando no quieres que lo sea.»

Es cierto que en esta historia hay drama por todos los lados y que a veces te dan ganas de cerrar el libro y tomarte un respiro de la lectura para hacer algo que te de un poco de alegría porque empatizas tanto con los personajes y los ves sufriendo tanto por cosas en las que ellos no pueden hacer nada por solucionarlo que se hace muy difícil seguir leyendo, y quizás soy yo, que soy un poco masoquista y por eso leo estas historias tan cargadas de drama, pero siempre me parecen las más bonitas y las que más se me quedan guardadas dentro.

Me ha gustado mucho la forma en la que la autora te hacía meterte en la historia describiendo perfectamente todo lo que les pasaba, lo que pensaban, lo que sentían haciendo que incluso a pesar de que nada de lo que pasa en el libro te pase a ti día a día, parece que sufres con los personajes y el
hecho de escribir los puntos de vista de los dos protagonistas hizo que también tuviera una visión más amplia de todo lo que sentían estos y así me hizo empatizar muchísimo más con ellos. 

Cuando estás cerca de mí, te quiero aún más cerca. Cuando te ríes, quiero que el sonido no se desvanezca nunca. Cuando estás triste quiero enjuagarte las lágrimas con besos. Sigues siendo el fuego que me calienta cuando mi vida se vuelve fría. Sigues siendo la voz que mantiene la oscuridad alejada de mí. Sigues siendo la razón por la que late mi corazón. Sigues siendo el aire en mis pulmones. Sigues siendo mi mejor subidón.

Sin duda os recomiendo esta historia tan cargada de sentimientos, que aunque me hizo querer acabarla rápido para leer algo más alegre porque me pasé medio libro sufriendo por los pobres protagonistas (sobre todo por Logan, ¡ay que penilla me ha dado todo el rato!) he disfrutado de una lectura preciosa.

Vane